sábado, 21 de noviembre de 2009

LITA FORD “Wicked Wonderland”

(Ear Music / Edel)

Casi quince largos años hemos tenido que esperar para echarnos al oído nuevo material registrado en estudio de la mano de una de las referentes dentro del hard rock ochentero femenino. Y la verdad es que visto el resultado la señora Lita Ford casi podía haberse ahorrado el esfuerzo y haber seguido perdida en su isla del Caribe junto a su familia. Una familia, en concreto su esposo Jim Gillette que creo tiene mucho que ver en estridente y poco atractivo sonido de este “Wicked Wonderland”, recordar que el amigo Gillette se dio a conocer musicalmente poniendo su voz a Nitro, la histriónica banda del guitarrista Michel Angelo. Y si encima a los temas les añadimos unos arreglos industriales, electrónicos, pesados y poco asequibles, casi lo único aceptable que nos queda de los mismos, es la voz de Lita que mantiene bastante bien el nivel de antaño, que aunque tampoco me pareció nunca la mejor cantante del mundo, ni mucho menos, sí sabía rodearse de buenos colaboradores, algo que creo que no ha conseguido en esta ocasión. Aun así se puede rescatar alguna composición algo más limpia y cercana a lo que nos tenía acostumbrados antaño, caso de la melódica y alegre “Scream 4 Me” que engancha con su estribillo, pero igualmente pesada en su ritmo y base, la hard rockera actual “Patriotic Sob” con unas líneas de guitarra muy similares al “Sister Of Pain” de Vince Neil, la más rotunda y misteriosa “Love” que adopta cierto ritmo rockero por momentos, al igual que la más industrial “Betrayal”, o la más hard rockera “Truth” que se cargan con sus arreglos dentro de un irregular desarrollo. El resto prácticamente para olvidar, mucha máquina, poca brillantez, y algún momento algo más aprovechable en forma de estribillos en los bonus tracks “Garden” y “Push”; especialmente olvidables y cargantes me resultan temas como “Sacred” plomiza a más no poder, la experimental “Indulgee” sin ton ni son, o la opaca y robótica “Inside” que no hay por donde cogerla. Junto a Lita y a Gillette completa la formación para este desafortunado trabajo el bajista Greg Hampton que también se encarga de los sintetizadores (pocas veces peor utilizados) y de la guitarra rítmica. Lo dicho, una pena, y una pequeña decepción para los que crecimos, quizá mirando más los posters, que escuchando los discos de esta rubia rockera americana.

Mariano Palomo

No hay comentarios: