viernes, 4 de abril de 2014

SANTELMO "Mamífero"

(CD Music / Duque Producciones)

Desde que Jero Ramiro nos sorprendíera en 2010 con este proyecto los seguidores del heavy metal clásico hemos ido recibiendo satisfacciones tanto en forma de brillantes discos en estudio como de enérgicos conciertos. A pesar de los cambios de vocalista, primero con Manuel Escudero, luego con Ronnie Romero y ahora con Nacho Ruíz, la trayectoria de la banda ha sido muy homogénea, con una línea estilística claramente enraizada en los sonidos heavy y hard más clásicos, pero con un tinte actual en su producción.
Como decía los cambios en el grupo han venido en el puesto de cantante, aunque los tres que han grabado con la banda tienen unas formas que no se alejan en exceso entre sí, pero cada uno de ellos con su propia personalidad, rallando todos a gran altura, luego al final es cuestión de gustos. Este que nos ocupa es el primer trabajo registrado por Nacho Ruíz, al que conocíamos sobre todo por su labor en Arwen, y que ahora en Santelmo encaja a la perfección en las composiciones de Jero que, además de tocar la guitarra con el nivelazo habitual, se encarga también de todos los textos de las canciones. Siguen en la banda tres elementos que vienen siendo esenciales en la misma, el cada vez más versátil bajista Luisma Hernández, el brillante teclista José Paz, y el tremendamente técnico Jaime Olivares a la batería.
En cuanto a los temas hay variedad, sin salirse de lo esperable, pero mostrando un buen rango de registros tanto vocales como instrumentales, comenzando por el heavy metal claro y potente de “El Retrono de Judas” que tras unos inquietantes coros monacales rompe con un riff acuchillando con poderío para que luego Jero despliegue fuerza y destreza, mientras la voz de Nacho tira hacia arriba con arrogancia pero matizándose con unas trabajadas partes melódicas completadas por unas teclas bien marcadas. Me recuerda un poco a la etapa Tony Martin de Black Sabbath.
Carga épica para la poderosa “Juego de Reyes” recorrida por exhibiciones de mástil algo escalilleras sobre un ritmo moderadamente cabalgante, resultando muy efectiva, adornada además por un buen duelo de teclas y guitarra barroco a lo Malmsteen, pero del bueno, no del de ahora. Más melódica y algo power nos encontramos con “Mil Vidas” que entra fácil por su estribillo clarísimo y de nuevo con las teclas clave de José Paz muy presentes junto a la melodía de voz de Nacho.
Se densifica y endurece el sonido para la rítmica “Mamífero”, en la que Luisma y Jaime reiteran el ritmo con profundidad dejando algún interesante detalle progresivo, que también aparecen en menor medida en la rápida y dinámica “Ser del Viento” una composición épica, positiva y expresiva que me recuerda mucho a los mejores Tierra Santa con un equilibrado balance de guitarras y teclas para que Nacho deje buenos golpes de voz en su estribillo que me da que será coreado con fuerza en directo.
Momento sombrío y denso con “Sola”, apasionada, rasgada, potente pero sin apenas ritmo adornada por otro gran solo de Jero, que seguidamente cambia la Fender Stratocaster por la acústica en el comienzo de “Destino, El Universo” llena de emotividad cambiando velocidad por intensidad con una dramatizada interpretación vocal de Nacho y con un precioso guiño a la música clásica en su solo de guitarra, que se afila para insertarse en sólido engranaje de la misteriosa “Serpientes y Mentiras”.
Rotundidad y vigor para marcar el ritmo cortado de “Angeles Muertos” arrogante y justiciera mostrando algunos matices de teclas, que crecen para brillar en la pegadiza “Somos” con una espectacular melodía vocal y con unos riffs incendiarios, endureciéndose aun más en la reivindicativa “Indignado” que cierra de forma rabiosa y veloz siendo de las más rotundas y cañeras pero perfectamente clara tanto en su instrumentación como en su mensaje.
Muy buen disco una vez más de Santelmo que, a pesar de los cambios, sigue consolidándose como uno de los nombres de referencia del heavy español.
Mariano Palomo

jueves, 3 de abril de 2014

ROMANTHICA "Eterno"

(Fair Warning)

Desde tierras catalanas nos llega el primer CD de los chicos de Romanthica. Una original y sugerente propuesta en la que, según reza su propia nota promocional, se entremezclan elementos góticos, metalaeros y pop rockeros que nos pueden recordar a gente como Him, Paradise Lost o Héroes del Silencio. La verdad es que cuando leí esto me quedé algo frío ya que ninguno de estos nombres me seduce excesivamente, y una vez escuchado este “Eterno” podemos ratificar esas influencias, con un resultado bastante correcto, aunque siga sin atraerme en exceso.
A destacar lo cuidado del sonido y las melodías, sobre todo vocales, la alta carga poética de las letras, y la buena producción de David Castillo que consigue que sin ser un disco directo ni inmediato, sí sea bastante agradable de escuchar. Por el contrario, incidiendo en eso mismo, puede acabar por resultar un poco plano y excesivamente ambiental por momentos. Pero bueno, es un disco de gótico, no de rock and roll ni de heavy metal.
Hablaba de las melodías vocales como uno de los puntos fuertes de las composiciones, y es que la voz de David Gohe se adapta y marca las ambientaciones con acierto balanceando desde unos tonos medios y profundos a otros más engolados, recordando muchas veces a Bumbury, pero con un barniz más denso en ocasiones. Temas como “Mercurio” o “Sacrificado” son dos en los que más palpablemente podemos comprobar este hecho. El primero con su atmósfera taciturna y casi lírica se pierde un poco por lo oscuro de su base salpicada de algún arreglo electrónico, y el segundo es más Héroes del Silencio, y me convence algo más pero sin llegar a arrancar del todo.
“El Vientre Del Huracán” también tiene esas reminiscencias del vocalista aragonés dentro de un tono bajo y atormentado acompañando la suave instrumentación que proponen sus compañeros, con mayor presencia de los teclados envolventes que dejan en segundo plano las guitarras de Sergi R. Perea y Rubén Rosas, que toman mayor protagonismo rasgando la melodía de piano de “Regreso al Sur del Edén” igualmente relajada pero más intensa con algunos arreglos electrónicos discretos, y en el medio tiempo “Nada” sonando más limpias y trabajadas sobre los pausados golpes de batería de Rud que cumple bien en la base rítmica junto al bajista Abel Aranda.
Un punto más rockero aportan la pareja de hachas al ritmo de “Muriel” matizado por unos teclados actuales para crear una interesante mezcla que engrandece la voz más matizada de David siendo de las más animadas y que más me han convencido, como lo han hecho en menor medida la pesada “Mejor Será Olvidar” que aun consiguiendo una buena ambientación no acaba de definirse, al igual que la actual “La Cura” que suena más desnuda pero también algo hueca para que brille una vez más su melodía vocal, como la melancólica “Al Final”.
Abren y cierran el disco con dos versiones del mismo tema, “Despierta”, mostrando un metal gótico decadente y ambiental que en su primer corte es más denso y sólido que en el último, algo más relajado con mayot presencia de piano y menor de guitarra, insertando un buen dueto de David con Liv Kristine (Leave’s Eyes, Theater Of Tragedy) para poner el broche final.
Mariano Palomo

miércoles, 2 de abril de 2014

AMARANTHE "The Nexus"

(Spinefarm Records)

No soy yo muy aficionado precisamente a los sonidos electrónicos cuando se mezclan en terrenos metaleros, como dirían los ingleses “not my cup of tea”, vamos, que no es mi rollo. Pero de vez en cuando me encuentro alguna cosita interesante aunque, siendo sincero, nunca ha acabado de llamar la atención. Es el caso de este segundo larga duración de Amaranthe, sobre todo por la figura de su vocalista Elize Ryd de la que ya tenía referencias por sus colaboraciones junto a Kamelot y sobre todo por su participación en el proyecto Avalon de Timo Tolkki.
Como contrapunto al melódico lirismo de Elize acompaña en las voces a ésta dos aguerridos maromos, Jake E que aporta unos tonos medios limpios y profundos a lo Roy Khan, y Andy que pone el tono gutural y agresivo creando una curiosa mezcla de death melódico, electro pop y gótico light, todo ello con una más que competente producción de Jacob Hansen que consigue que suenen bastante compactos sin apenas aportes significativos del guitarrista Olof Mörck que adquiere mayor protagonismo como teclista.
El mayor problema que le encuentro a este tipo de grupos es el excesivo sonido maquinero que proponen, aunque por momentos son capaces de sonar melódicos, frescos y atractivos, algo a lo que ayuda bastante la extensión de los temas con algo más de tres minutos y medio de duración media. Empiezan bastante rápidos y directos con la acelerada “Afterlife” con Morten Lowe machacando sus tambores, algo disparados me da la sensación, y con la melodía vocal de Elize llegando bien, resultándome una especie de cruce entre Dragonforce y Kamelot, pero con arreglos electrónicos.
Estos arreglos se acentúan en la pegadiza “Invincible” más distorsionada y con mayor participación de la cavernosa voz de Andy, sintetizándose más aun el sonido en “The Nexus” o en “Razorblade” que llegan a ser muy pop en sus partes vocales más limpias pero contrarrestado por partes duras y rasgadas, que se acentúan compartiendo plano prácticamente a partes iguales en la dinámica “Theory Of Everything” en la que por fin comparece tímidamente el sonido de guitarra, prolongándose con mayor distorsión en la resultona “Stardust” melódica y potente con unos curiosos arreglos espaciales.
Bajan el ritmo para dejarnos la suave y romántica “Burn With Me” creando un diálogo entre Elize y Jake que sube un poco de tono en su estribillo pero sin excesivo poderío, que aumenta en la electro-gótica “Mechanical Illusion” con Andy volviendo más agrio y agresivo para compensar las melodías de sus compañeros, al igual que en rápida “Future On Hold” con más guitarras que la media, que desaparecen prácticamente en la cibernética “Electroheart” perfectamente bailable en cualquier club berlinés, para reaparecer en la enérgica “Transhuman” que me suena a unos Kamelot endurecidos, siendo de las que más me ha convencido, junto a la final “Infinity” en la que insertan un brillante registro lírico a su brillante estribillo.
Se completa el CD a modo de bonus tracks con la rápida y agresiva “Leave Everything Behind (Early Version)” rescatada de su primer trabajo homónimo, y con una relajada versión acústica de “Afterlife” que me seduce casi más que en su primera concepción eléctrica con las voces de Elize y Jake exhibiéndose desnudas sobre un bonito rasgueo acústico sin apenas ritmo.
Como decía antes, este disco no me enloquece, no me transmite demasiado, pero reconozco que tiene cierto atractivo y se intuye un generoso trabajo de producción y realización detrás que hace que pueda resultar bastante interesante para los más avezados en estos sonidos.
Mariano Palomo

HELSTAR "This Wicked Nest"

(AFM / Avispa)

Los tejanos Helstar vuelven a la carga con nuevo LP tras cuatro años de sequía discográfica. Sus anteriores entregas “The King Of Hell” y sobre todo “Glory Of Chaos” estaban dotados de una notable carga thrahser que ahora en este “This Wicked Nest” se ve algo aligerada dando mayor espacio a melodías clásicamente heavy metaleras pero sin dejar en absoluto registros más duros. Con un James Rivera que va agriando su voz paulatinamente a medida que va avanzando el disco, que comienza rápido y contundente con “Fall Of Dominion” que tras una inquietante arenga megáfono incluido acelera sobre los reiterados redobles de Mickey Lewis, junto a los ataques de guitarra a lo Priest que proponen Larry Barragan y Rob Trevino, resultando perfectamente eficaz para abrir.
Más matices encontramos en “Eternal Black” con un ligero toque thrash en su distorsión de guitarras amortiguado por la aguda voz de Rivera y por unos arreglos discretamente progresivos que balancean entre sonidos tétricos y furiosos, volviendo la velocidad más directa pero sin arrollar en el tema título “This Wicked Nest” marcado por su arrogante estribillo y su buenos desarrollos guitarreros, que se extienden en la ochentera “Soul Cry” que toma un cariz más agresivo y algo angustioso en sus líneas vocales.
Curioso ejercicio instrumental el que nos encontramos en el ecuador del disco con “Isla de las Munecas” (supongo que querrán decir “Muñecas” pero los teclados en inglés no tienen “ñ”) en la que alternan partes melódicas y contundentes con solvencia sonando clásicamente americanos, para a partir de aquí endurecerse notablemente con temas más thrashers como la oscura “Crused” que se alarga en exceso reiterando su densa estructura, o la tremendamente agresiva “Defy The Swarm” con un ritmo machacón de batería mejorado por unas curradas guitarras que acaban por hacerla muy potente pero algo estridente, sobre todo por la voz excesivamente áspera de Rivera.
Mejoran un poco la rítmica aunque algo desganada “It Has Risen”, y algo más la extensa “Magormissabib” de sólida base adornada por interesantes guitarras que aclaran su inquietante sonido, llenando sus dos últimos minutos de evocadora música oriental para relajarnos. Un final tranquilo para un buen disco, notable técnicamente, cuidado compositivamente, pero con algún que otro momento excesivamente denso y agrio para mi gusto.
Mariano Palomo