lunes, 29 de noviembre de 2010

JEFF SCOTT SOTO “Live At Firefest 2008”

(Frontiers / Mastertrax)

Con algo de retraso ve la luz este directo registrado hace un par de años a cargo de la banda de Jeff Scott Soto. La verdad es que siempre está bien escuchar a una de las mejores voces del hard rock mundial, pero por otra parte no aporta absolutamente nada en lo que a originalidad y novedad se refiere en la carrera del cantante de Brooklyn. Más aun si tenemos en cuenta que apenas hace un año sacó el directo en Madrid de la sala Heineken prácticamente con el mismo repertorio dentro de la gira de su álbum “Beautiful Mess”, aunque eso sí con distinta formación. En este último disco registrado en el Rock City de Nottingham dentro de la quinta edición del Firefest, Jeff está acompañado por Howie Simon a la guitarra, Gray Schutt al bajo y David Dzialak a la batería, haciendo todos ellos un muy buen trabajo, aunque me quedo con la aportación a los coros de Schutt, además de su buena ejecutoria al bajo. Y en cuanto a los temas, lo dicho, cortes de “Beautiful Mess” como la intensa y guitarrera inicial “21st Century”, la enérgica y dinámica “Drowning”, o la rascada medio funky “Hey”. Aunque para funky el medley lleno de diversión con el que viene cerrando sus conciertos Jeff últimamente a base de dar su toque festivo y bailongo mezclando fragmentos de clásicos de la música disco como “Macho Man”, “Play That Funky Music”, “Staying Alive” o “Shake Your Bootty” con otros más rockeros de “We Will Rock You” o “I Love Rock & Roll”. Por lo demás, bastante previsible, aunque menos extenso que en otras ocasiones, con los inevitables recuerdos a Talisman con un breve retazo de “Colour My XTC” y con una versión más corta de lo habitual del clásico “I’ll Be Waiting”, además de los buenos temas de Jeff en solitario como las más A.O.R. “Soul Divine” y “Our Song”, o esa joya del hard melódico que es “Eyes Of Love”, sin olvidar esa versión que ya se ha agenciado del “Crazy” de Seal, que da paso al habitual medley de piano en el que luce la voz recordando los temas lentos de su carrera. Lo dicho, siempre brillante, siempre efectivo, divertido, versátil, pero repetitivo en lo que a sus lanzamientos se refeire. Para apreciar este trabajo no deberíamos haber disfrutado de su “Live In Madrid”, más completo y además con el añadido del DVD que en esta ocasión parece que no se publicará.
Mariano Palomo

SENES “De-evolution Of Theory”

(Global Music Ltd.)

Después de mucho tiempo volvemos a traer a Alianza un disco instrumental de un guitar hero. En este caso descubrimos al versátil hacha norteamericano Steve Senes, que se estrena en solitario con este trabajo, bien ejecutado, variado y lleno de momentos que inevitablemente nos recuerdan a los grandes de la guitarra, aunque sobre todo me trae a la mente al ex Danger Danger Andy Timmons, tanto por su técnica como por su sonido. Un sonido actual y duro en temas como “The Swami” de ritmo cortado y acordes virgueros, o en la aguda y rápida de base más heavy “Colossus” con algun detalle suave de samples electrónicos, que reaparecen en la más moderna y experimental “Jam Bomb” con riffs potentes y saturados. Más ritmo hard rockero encontramos en la ochentera “Greaseball” que bien pudiera haber llamado la atención del cazatalentos Mike Varney por su dinamismo y melodía, al igual que la vacilona “Highball” de ritmo alegre mezclando técnica y asequibilidad con aires de road movie. Igualmente asequible y original encontramos “Facecheck” con buenos y virtuosos efectos, para ponerse más rockanrolero pero igualmente tocón en “High & Mighty” sonándome un poco al Vai más divertido, para sorprendernos a base de ritrmo funky con “Cop Show” bailable y salpicada por buenos arreglos de teclas y bajo. Los temas más tranquilos también tienen cabida, caso de la suave acústica “Ruth” que va tomando cuerpo en su parte central con una profunda y melódica presencia eléctrica, de la más pausada y barroca “Angel” con sonidos de cuerda y guitarra española, con ligeros matices eléctricos que dab brillo a la pieza, o de la más suave y envolvente “Mare Tranquillitatis” en la que vuelve a sorprender con discretos toques reggae y latinos a lo Santana. El cierre lo pone una sosa y pellizcada “The Afterglow” que pasa prácticamente inadvertida para poner completar este correcto disco que no descubre gran cosa, pero que gana puntos por su pulcritud y variedad.
Mariano Palomo

QUIREBOYS “Live In London”

(DVE / Global Music Ltd.)


Uno de los máximos exponentes del hard rock & roll británico nos dejan un nuevo lanzamiento en directo para que no nos olvidemos de ellos hasta que vuelvan a ofrecernos nuevo material en estudio, algo que no hacen desde 2008 con el correcto “Homewreckers & Heartbreakers”. Rescatan una entrañable actuación de 2004 en el mítico Marquee londinense en el que compartían cartel con sus paisanos Thunder (x en la quiniela del top inglés hard rockero), y donde recuperaban su esencia primigenía en mitad de la gira Monsters Of Rock dejando los pabellones para volver a donde empezaron a forjar su leyenda. La calidad de sonido es bastante buena, y el repertorio plagado de clásicos de su maravilloso debut discográfico “A Bit Of What You Fancy”, con un mínimo guiño a “Bitter Sweet And Twisted”, y cuatro temas de “This Is Rock & Roll” que en cierto modo presentaban. Es precisamente de este trabajo de donde rescatan “C’mon” para abrir con su ritmo arrastrado y cazallero en la voz de Spike, bien secundado por las brillantes guitarras de Guy Griffin y Luke Bossendorger. Una pareja que sigue tomando protagonismo junto a la pianola de Keith Weir en la caraismática “Mislead” llena de rollo y vacile, seguida por la fiestera garantía de éxito que supone “Hey You” llena de buenos coros y sonidos slide a cargo de Guy, continuando en la misma línea con un ligero toque sureño para “This Is Rock & Roll” que destaca por la pegada del batería Jason Bonham que acaba en plan vacilón con el incio del “Rock & Roll” de los Zeppelin, de casta le viene al galgo. Más sensualidad y melodía para la más contagiosa a lo Faces “There She Goes Again”, bien secundada por la setentera de deje arrastrado y aire canalla “Show Me What You Got”, volviendo a acelerar con la más descarada y festiva de aires western “Tramps & Thieves”. Momento para la relajación con la siempre intensa y emotiva “I Don’t Love You Anymore” que no para de crecer con sus tremendas guitarras sobre la base de piano de Keith y de la apasionada voz de Spike, bajando un poco de nivel con la menos habitual “Turn Away” que aun así cumple, para volver a subir la adrenalina con la puramente rockanrolera e inevitable “7 O’Clock” que siempre triunfa para cerrar antes de los bises con un Spike pletórico. Vuelta a escena con la western de ritmo tendido y polvoriento “Whippin Boy”, llena de desgarro vocal y curradas guitarras, con el público coreando para acabar de cerrar la fiesta totalmente involucrado con “Sex Party” de forma desmadrada haciendo que uno se mueva sin remisión con la interacción creada entre banda y audienca. Buen directo, como siempre de los londinenses, que sirve como entremés hasta que vuelvan a sorprendernos con un nuevo trabajo en estudio. También lo sacan en DVD junto al CD, con una calidad de imagen y producción tan sencillas como efectivas, y sin más contenidos que el concierto puro y duro, sin extras ni contenidos superfluos.
Mariano Palomo

viernes, 12 de noviembre de 2010

MAMA LADILLA “Jamón Beibe”

(BOA)

Llevábamos cinco añitos sin entrega discográfica por parte de Abarca y compañía. Los que conocemos a esta veterana banda del barrio madrileño de Moratalaz ya sabemos lo que hay. Unas limitadas cualidades musicales compensadas por unas letras tremendamente curradas, en las que se combina la crítica social más incendiaria con el humor más bestia e irreverente. Para bien o para mal, el resultado suele ser el mismo. Álbumes en los que la mitad de los cortes son aburridos o ininteligibles mientras la otra mitad, que son los que salvan el conjunto, son simplemente geniales. Este “Jamón Beibe” no es una excepción, y encima esta sensación de dualidad se ve acentuada por la gran cantidad de temas, nada menos que 17, entre los cuales no falta relleno precisamente. Como hay que ser positivos, pasamos olímpicamente de la morralla y vamos a centrarnos sólo en las canciones que en nuestra opinión más merecen ser mencionadas. Por supuesto que contamos con que muchos no estarán de acuerdo y según su propio criterio serán otras las mejores composiciones. Una temática muy recurrida siempre por los Ladilla es el insulto a quienes se dejan alienar teniendo la posibilidad de evitarlo. Y aunque en el fondo la idea se repita una y otra vez, las letras suelen ser tan descojonantes que nunca nos cansamos de ellas. “Majaderos”, con tan explícito título es un gran ejemplo, y lo mismo podemos decir de “Fuenteborreguna”, mejor todavía si cabe, o de “Himno”, que quizá peca de un tanto esquemática. Algo más original es “El Clip”, que trata de un idiota que piensa que el asistente de Word es un ser inteligente real. Un asesino caníbal es el protagonista de “Comportamientos atípicos”. “Nestor Patou” resultará incomprensible para los que no hayan visto la película “Irma la Dulce”. “Merilin Feifa” es la versión femenina de “Janfri Güein”. Curiosamente es en la recta final del disco cuando aparecen la que quizá sean los mejores temas, “Truños catódicos”, que obviamente pone a parir la televisión, y “Absolutamente nada” una festiva invitación a vivir la vida y disfrutar el momento. Aunque como ya hemos dicho el CD está lleno de altibajos y es demasiado largo, cumple su función de hacer reír y divertir, que en el fondo son sus únicas pretensiones.
Nacho Jordán

THE CASTRO ZOMBIES & THE MUTANT PHELGM/EL BUENO, EL FEO Y EL MALO/DIRTY SÁNCHES “2x1=3”

(Fragment Music/Collector´s Series)




Esto de que varios grupos compartan un mismo disco es algo que creo que no veíamos desde la época del vinilo. Cuando enumeremos los músicos de las tres bandas que integran este trabajo, los lectores comprenderán el extraño título del CD. Los integrantes de The Castro Zombies & The Mutant Phelgm (joder con el nombrecito) son Nicolas Hock en la guitarra, Ferri en el bajo (ambos comparten tareas vocales) y Marisun a la batería. En cuanto a El Bueno, El Feo y El Malo, está formado por unos tales Joaqui Giuffre a la batería, Wen Eastwood en el bajo y Manuelo Van Cleef a la guitarra, estos dos últimos también se encargan de las voces. ¿Y Dirty Sanches? Pues es un batiburrillo compuesto por músicos de ambas bandas, en el que participan Ferri, Nicolas, Wen y Manuelo. Ahora es cuando entendemos lo de 2x1=3. Todos ellos son músicos cuya trayectoria previa desconocemos, más aún obviamente en el caso de los que utilizan pseudónimos. El único al que conocemos es a Ferri, pero no por su actividad musical, sino por su dilatada trayectoria periodística. Por dar un par de ejemplos, escribe en la veterana web La Factoría del Ritmo, y es el artífice de la página Red Baron Fan Club.
Pero centrémonos en la música. Con tan pocos cortes por banda, es difícil hacerse una idea completa y objetiva de lo que es cada grupo, pero lo intentaremos. Empezando por el principio, con Castro Zombies (perdonad que abrevie un poco) esperas que con ese nombre tengan alguna semejanza con Barón Rojo, pero la realidad es otra, porque son un grupo absolutamente “ramoniano”. Los dos primeros temas, “Bathroom Girl” y “Butthead” vienen en inglés. Mientras que el tercero y último “Destrozando El Olvido”, que evidentemente es en castellano, trata del candente asunto de la memoria histórica.
De El Bueno El Feo y El Malo, vienen cuatro canciones. También llevan un rollo bastante punkarra, aunque no en la onda “ramoniana”, carecen de la desbordada velocidad de sus compañeros de CD. En cierto modo son más variados. Quizá las más destacables son “No Queda Rock´N´Roll”, marchosa y fiestera, y “Zeltgeist” enervante pero con una letra acertada describiendo lo negativo de todas las religiones. “Demasiado Tarde” la encuentro lentorra e insulsa, y tampoco me ha llenado “El Duelo”, que mete elementos de la música del oeste.
Ya sólo queda Dirty Sánches, de los que sólo tenemos dos temas, diametralmente opuestos. “Perro De Paja” me ha traído a la memoria las composiciones mas festivas del rock radikal vasco, mientras “Málaga Blues” es eso, un blues, pero totalmente de coña.
En fin, voluntad no les falta a ninguno de los tres grupos, pero hay que mejorar muchos aspectos. Lo que echa a perder el disco entero es su nefasta producción, y es una verdadera pena, porque seguro que con los medios adecuados el resultado habría sido mucho mejor. Particularmente las voces son casi inaudibles, esperemos que estas deficiencias se subsanen en las próximas entregas.
Nacho Jordán