(ear-Music)
Seguramente estemos ante una de
las pocas bandas del planeta que con más de cuarenta años de carrera son
capaces de seguir ofreciendo magníficos shows en directo y de seguir sacando
material atractivo para sus fans basándose en apenas un par de decenas de
canciones. Y es que cuando esas canciones son tan inmensamente buenas poco
importa las veces que las escuchemos y en el formato que lo hagamos, eléctrico,
acústico, o como en este caso acompañadas por orquesta y coro de más de cien
músicos.
En cualquier caso habrá a quien
le parezca que Foreigner ya están
estirando demasiado el chicle y que no estaría mal escuchar nuevo material del
grupo, quizá no les falte razón, pero sigue siendo una delicia volver a
escuchar sus clásicos, en este caso con los matices particulares del sinfonismo
coral que les enriquecen, eso sí, sin perder para nada su esencia. Los
responsables de esta grabación, registrada el pasado mes de mayo de 2017 en la
localidad suiza de Lucerna, además de los titulares de la formación anglo
americana, son los componentes de la 21th
Century Symphony Orchestra & Chorus dirigida por Ernst van Tiel, junto a los productores Dave Eggar y Chuck Palmer.
Y el resultado es de lo más
atractivo y brillante, comenzando por un a original “Overture” llena de lirismo
con guiños a melodías del grupo mezcladas con retazos de piezas icónicas de la
música clásica, para dar paso seguidamente a una revisión algo teatralizada
pero bastante fiel de “Blue Morning, Blue Day” donde lucen los coros de los
miembros de la banda acompañando a un enorme Kelly Hansen que no baja de nivel en ningún momento, mostrando una
vez más su enorme talla vocal.
Siguen con “Cold As Ice” donde
interactúan brevemente con el público insertando ligeras variaciones de tempo
con orquestaciones entre enormes armonías vocales y dejando una exhibición de
órgano con un pequeño guiño a “Black Night” de Deep Purple, para envolvernos seguidamente con la elegante “Waiting
For a Girl Like You” adornada con bonitos arreglos de cuerda, entrando después
con una suave melodía de flauta y piano que da paso a una tremenda “Say You
Will” donde mandan las voces y las
guitarras acústicas.
Sorprenden para terminar el
primero de los dos CDs en los que se divide el lanzamiento, con dos temas que
comienzan con espirituales coros que preludian unas preciosas revisiones de “When
It Comes To Love” y “That Was Yesterday”, la primera con destacada
participación al saxo de Tom Gimbel
compartiendo foco con otra emotiva interpretación vocal de Hansen. En la segunda cobra mayor peso la orquestación creando
bonitos e intensos matices a una composición ya de por sí llena de fuerza y pasión.
El segundo CD se abre con “Feels
Like The First Time” bastante fiel a la original con discretos coros y adornos,
que van tomando mayor protagonismo en una excelente “Starrider” donde también
repuntan con fuerza las guitarras de Mick
Jones y Bruce Watson rodeados de
emocionantes aportes corales llenos de lirismo, que se prolongan junto a
sonidos de cuerda en el comienzo de “Double Vision” en la que se marca con
rotundidad la pegada de Chris Frazier
y el bajo de Jeff Pilson, apoyando
también a los coros, como siempre impecables.
Aparece elegante y seductora “Fool
For You Anyway”, tema primigenio de la banda y el menos habitual en sus sets,
pero que resulta delicioso lleno de soul y profundidad con grandes aportaciones
de sonidos de viento, que, como no podía ser de otra forma, se marcan de forma enorme
con el saxo de Gimbel en el clásico “Urgent”,
sencillamente espectacular con todos los músicos a un nivel sobresaliente.
Nos acercamos al final con “Juke
Box Hero” abierta por un solemne preludio coral para ir creciendo suavemente
sobre sonidos de cuerda y percusión entrando las guitarras nítidas e incisivas,
irrumpiendo la voz principal marcando el tempo, subiendo y bajando sostenida
sobre unas armonías casi místicas que nos llevan hasta los once minutos de
éxtasis musical. Para el cierre, como no podía ser de otra manera, nos regalan
una aligerada e interactiva revisión de la balada por excelencia “I Want To
Know What Love Is” haciendo participar al público que sigue el compás marcado
por el maestro de ceremonias Hansen,
rematando con unos tremendos coros cercanos al góspel.
Excelente manera de rubricar casi
hora y media de delicatesen musical de la mano de una de las bandas más grandes
del rock melódico mundial, perfectamente acompañada una magnifica orquesta
sinfónica y coros, que nos hacen disfrutar de sus grandes temas con unos
matices distintos.
Mariano Palomo
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