ETERNAL IDOL "The Unrevealed Secret"

(Frontiers Music)

Los amantes del metal sinfónico pueden estar de enhorabuena con el lanzamiento del debut discográfico de Eternal Idol, un proyecto gestado en tierras italianas con la figura del vocalista Fabio Lione (Angra, Rhapsody, Vision Divine) como elemento más reconocible. Pero Lione no está solo y ni siquiera tiene la titularidad total de las tareas vocales que comparte con la joven cantante Giorgia Colleluori, creando momentos llenos de fuerza y lirismo que brillan sobre una elaborada instrumentación que corre a cargo del guitarrista y teclista Nick Savio, del batería Camilo Colleluori y del bajista Andrea Buratto.

Entre los cinco han creado una misteriosa historia conceptual sobre el bien y el mal encarnado en las voces de Fabio y Giorgia rodeándola de una cuidada banda sonora tomando los elementos más característicos del metal sinfónico pero sin caer en la reiteración y pesadez de la que, para mi gusto, suelen adolecer este tipo de bandas. Seguramente el buen trabajo de las armonías vocales es el hecho diferencial más notable, pero cabe también destacar las brillantes aportaciones de Nick a la guitarra, las buenas ambientaciones orquestales y la compacta base rítmica que sustenta toda la obra.


Una obra que comienza de forma rotunda con la vibrante “Evil Tears” con Giorgia abriendo las hostilidades con melódico poderío entre riffs punzantes, ataques orquestales y poderosos golpes de percusión antes de ser replicada contundentemente por Fabio llegando a ofrecer momentos inquietantemente fieros que contrastan con otros más relajados pero igual de dramáticos prolongándose, pero en clave más lírica en la teatral “Another Night Comes” ya con el dúo protagonista resaltando desde el inicio alternando con acierto, como sucede en la poderosa “Awake In Orion” más cercana al power con el estribillo a dos voces golpeando con fuerza entre las teclas de Nick muy marcadas junto al bajo de Andrea, algo más asequible y ligera en su orquestación pero también con un notable trabajo compositivo.

Continúa desarrollándose la historia con “Is The Answer Far From God”, algo intermitente en su ritmo, con mayor carga sinfónica y dramática con la parte masculina llevando el peso vocal desembocando en un virtuoso solo de guitarra, antes de caer en el tétrico ritmo de “Blinded” barnizada de un ligero toque gótico con la orquestación cayendo sobre su melodía central, recuperando el tono más lírico con el vibrante dueto que proponen en “Sad Words Unveiled” salpicada de algunos sonidos más actuales, volviendo a terrenos oscuros en la románticamente terrorífica “Desidia” con la cavernosa voz de Lione replicada por una desafiante Giorgia relajándose luego para ofrecer uno de los momentos más intensos y expresivos del disco.

Más tranquila puede parecer “Hall Of Sins”, pero sólo en su suave inicio barroco, ya que luego rompe con su base redoblada subiendo y bajando el ritmo ente el que se cuelan las voces agresivas dejando buenos repuntes de intensidad, entrando luego en una atmósfera más angustiosa con “Feels Like I’m Dying” de nuevo con algún envolvente deje gótico que se va aclarando con la melodía de voz de Lione, que sigue liderando en clave operística, aunque con Giorgia acompañando acertadamente en segundo plano, en la apasionada lenta “A Song In The Wind” adornada por otro buen solo de Nick.


Para el final quedan dos cortes con tientes más actuales, “Stormy Days” de ritmo pesado, arreglos sintetizados y afinaciones modernas, pero con el lirismo y melodía que aportan las armonías vocales para aligerarla, como sucede en “Beyond” que cierra con Giorgia de nuevo en primer plano dentro de un sonido más heavy de ritmo atemperado que encierra un estribillo lineal mejorado por un punzante y técnico solo de guitarra recordándome en su conjunto un poco a los estadounidenses Evanescence.

En resumen un disco bien trabajado, con momentos brillantes, y con la suficiente calidad como para considerarlo de lo más destacado que ha salido últimamente dentro de su género. Esperemos que sigan revelándonos más secretos en próximas entregas.

Mariano Palomo