(Mascot Records)
Encuentro un sonido compacto y
limpio, con concesiones a los riffs y entonaciones actuales, pero con una
tremenda carga añeja, con unos coros fantásticos acompañando durante todo el
trabajo que nos acercan al bules y al sureño más puros, quedando un conjunto muy
auténtico, muy analógico. Empezamos a comprobarlo con un tema rítmicamente
poderoso como “Bad Habit” con un rollo setentero magnífico quedando patente con
la reiterada pegada del batería John
Fred Young y la pulsación de bajo de Jon
Lawhon, dejando que Robertson y Ben Wells dibujen lisérgicos acordes
con sus guitarras.
Siguen vibrando en clave sureña
con “Burnin’” espectacularmente arrastrada con una gran melodía salpicada de
matices rítmicos recordando un poco en su sonido de guitarra a ZZ Top, como sucede en la animada “New
Kinda Feeling” adornada por unos guapos aportes de pianola y por unos curiosos
efectos vocales quedando de lo más resultona y fresca, atemperando el ritmo en
la más bluesy “Carry Me Down The Road” intensa en su percusión y profunda en su
voz que llega vibrante al estribillo junto a currados detalles de guitarra
rompiendo con un incendiario solo.
Más espiritual aparece la lenta “My
Last Breath”, rock sureño con tintes blues en sus coros femeninos y en su
sonido de órgano acompañando unas hechizantes guitarras, para tirar luego de
afinaciones más actuales en la rítmica “Southern Friday Night” de groove marcado
y aportaciones de talk box dentro de su festiva y rotunda propuesta que se
prolonga en la pantanosa “Dancing In The Rain” que seduce con una espectacular
base rítmica entre la que se insertan unas guitarras de alto octanaje y unas
voces llenas de fuerza sin necesidad de subir mucho el tono, como sucede con “Ain’t
No Body” más arrastrada con detalles de slide y con un estribillo recordable y
reiterado replicado por unas excelentes voces femeninas dando un ligero toque
soul.
Coros y soul que se incrementan
en sensual y potente “James Brown” de rítmicas marcadas y trabajadas armonías
vocales creando una tórrida ambientación, endureciéndose a continuación en “You
Got The Blues” con unos riffs pesados matizados por agudos licks rozando el
funky con un estribillo entrecortado a golpes de voz, volviendo al rock sureño
más tórrido con “I Need a Woman” de guitarras penetrantes y aguardentosos pero
melódicos tonos vocales.
Sigue el sureño más atemperado
presente con “Get Me Over You” corte racial y embaucador en el que meten unos
curiosos coros y percusiones indias, antes de cerrar definitivamente con el
tema título “Family Tree” que atrapa con su sensual cadencia lleno de cuerpo y
esencia dejándonos un último solo de guitarra de nivel y un órgano final para
acabar de redondearlo.
Disco magnífico que hace que se
confirmen las buenas sensaciones que me dejó la banda con su anterior trabajo
de versiones, resultándome el más ligero e interesante de su discografía hasta
ahora, bien por Black Stone Cherry.
Mariano Palomo
No hay comentarios:
Publicar un comentario