RAVENEYE “Nova”

(Frontiers Music)

Tras hacerse un hueco en la escena británica a base de girar con grandes nombres del hard rock mundial y después de publicar el pasado año un interesante EP, los chicos de RavenEye ponen estos días en la calle su primer larga duración bajo el título de “Nova”. Un disco en el que el trío liderado por el cantante y guitarrista Oli Brown, acompañado por el bajista Aaron Spiers y por el batería Gunnar Olsen, recogen la esencia de los sonidos pesados setenteros pero con una vuelta de tuerca actual que hace que el resultado final sea cuanto menos atractivo, independientemente de que por momentos a mí se me haga excesivamente denso.

No se puede negar el impacto que ya han empezado a tener en el público a nivel global, algo que intentarán reforzar con este disco de sonido compacto y rotundo, cuidando sus elementos y con una razonable variedad dentro de que las bases rítmicas pesadas siempre están presentes en mayor o menor medida, yendo desde los sonidos stoner a los alternativos, pasando por  momentos más directos.

El primer acercamiento stoner lo encontramos en la inicial “Wanna Feel You”, de cadencia pesada, voz versátil alternando tonos agudos y graves junto a unas guitarras gordas y melódicas, creando todo ello una ambientación densa y algo atormentada prolongándose en exceso para mi gusto, un poco más corta creo que hubiera estado mejor. Esos mismos elementos los encontramos también en la actual “Out Of The Rain” de nuevo con el bajo de Aaron muy marcado aunque con algo menos de llegada que la anterior resultando más sombría y monótona, como les sucede a “Oh My Love” con la distorsión alta y la voz tratada con efectos recordando a los australianos Wolfmother, y la sinuosa “Supernova” excesivamente plomiza con cierto aire Soundgarden apoyándose en unos relajados coros que la aligeran un poco.

Estos toques alternativos, para entendernos, aparecen también en las guitarras sucias de la rabiosa por momentos “Inside” aportando garra e intención sobre una línea melódica con bastante pegada, como sucede en la más ligera y asequible “Come With Me” que es la que más me ha convencido por su guitarreo directo acelerado y su pegadizo toque festivo, al igual que en la limpia y desafiante “Hero” aunque me llena menos que la anterior situándola al nivel de la arrogante “Hate” de estribillo claro aportando agilidad entre sus pesados riffs.

Por su pare “Walls” a pesar de aportar buenas melodías vocales dentro de un tempo relajado estas se pierden entre bases y guitarras algo embarulladas y chirriantes, más o menos lo mismo que le sucede a “Madelaine” distorsión alta y ritmillo con intención pero no acaba de rematar, consiguiéndolo en mayor medida con la desgarrada final “Eternity” que comienza acústica e intimista para romper después con la entrada de la base rotunda e intensa y con unas trabajadas aportaciones eléctricas incisivamente melódicas.

Buen cierre de un disco recomendable para los seguidores de bandas como las anteriormente citadas, que va ganando con las escuchas y que me da la impresión que debe ser bastante más disfrutable en directo si Oli y compañía son capaces de meterles un punto más de ritmo y energía a los temas.

Mariano Palomo