(Frontiers Music)
El versátil vocalista
estadounidense Kelly Keeling pone en
circulación en estos días su nueva entrega en solitario. Bajo el título de “Mind Radio” el ex Baton Rouge recupera su vena más Hard A.O.R. junto al equipo italiano
de músicos residentes de Frontiers, Alessandro Del Vecchio (teclas y
coros), Mario Percudani (guitarras),
Anna Portalupi (bajo) y Alessandro Mori (batería), consiguiendo
redondear un trabajo brillante, con clase y energía mostrando la mejor versión
de un señor que nos defraudó mucho en su bochornosa aparición en el Firefest de hace un par de años. Afortunadamente
parece que aquel fue un hecho aislado propio de los excesos festivaleros y
ahora vuelve con este magnífico disco lleno de temas interesantes.
Arranca el disco con dinámica “This
Love Our Paradise” llevando desde su melodía central hasta un buen estribillo a
ritmo vivo, elegante y rotunda, empastando bien guitarras y teclados, subiendo
un escalón en cuanto a intensidad vocal y técnica con la más elaborada pero
asequible “Isolated Man”, llegando a rozar el sinfonismo luego con la
envolvente “Sunshine Over Me” enormemente melódica con un regusto a lo Toto sobre todo en los rasgueos de
guitarra de Percudani, siguiendo
esta línea apasionada con la atemperada “Still Need You In My Arms”, elegante,
con feelin’ y fuerza en la voz de Keeling
transmitiendo espectacularmente.
Giro más clásicamente hard
rockero para dejarnos la intensa “Written In The Fire” con las guitarras más
duras y marcadas enlazando con acierto junto a unos sonidos de órgano y a unas
melodías de voz muy Joe Lynn Turner,
repitiéndose la fórmula en las más áspera “Monkey House” de sinuosas líneas
vocales, y “Who Do You Run To” más agresiva y directa recordando un poco a los Baton Rouge más cañeros. Entre medias
la pegadiza “Ride The Storm” que crece con poderío sobre unas preciosas teclas
y una sólida base rítmica.
A.O.R. más clásico encontramos en
“Take Me To The Limit” con un enorme trabajo vocal, una gran pegada y unos desarrollos
de guitarra a lo Journey, como
sucede en la expresiva “No Man’s Land” con un elegante deje sinfónico en sus
teclados, o en la embaucadora “Frozen Time” cálido medio tiempo que conquista
con suave encanto notándose la labor en los coros de Del Vecchio, tirando antes de acústica en la más relajada “Love
Will Tear Us Apart” adornada por unos bonitos arreglos de teclas.
Resumiendo, agradable sorpresa la
que me he llevado con este más que recomendable disco que está llamado a ser de
los más destacados del 2015 dentro del género, además de por su calidad, por su
personalidad, aunque inevitablemente recuerde a los grupos mencionados.
Mariano Palomo
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