lunes, 18 de enero de 2010

BRIAN HOWE “Circus Bar”

(Frontiers / Mastertrax)

Quizá el nombre de Brian Howe no sea excesivamente conocido para el gran público, pero en su currículum puede presumir, entre otras cosas de menor importancia, de haber sido el sucesor de Paul Rodgers en los míticos Bad Company. Este luchador cantante originario de Porstmouth puso su voz durante diez años, de 1984 a 1994, a la etapa más A.O.R. de la mítica formación británica, participando en discos de la talla de “Holy Water”, “Here Comes Trouble”, “Fame And Fortune” o “Dangerous Age”, para ser sustituido posteriormente por Robert Hart. Desde entonces Howe apenas ha ofrecido muestras de su talento musical, dejándonos únicamente un trabajo en solitario publicado inicialmente en 1997 bajo el título de “Tangled In Blue” y reeditado posteriormente en 2003 renombrado para Europa como “Touch”, pasando prácticamente desapercibido. Ahora parece querer recuperar el terreno perdido y lo hace con este “Circus Bar”, en el que mezcla la vena melódica más clásica y reconocible, con sonidos más rockeros y actuales, acompañado por un buen número de músicos invitados, destacando la labor del guitarrista, también productor y compositor, Brooks Paschal. El comienzo con “I’m Back” me dejó algo descolocado de primeras, con sus aires modernos, mostrando una voz más ronca de lo habitual, pero con la limpieza y enganche necesarios, sobre todo por su estribillo. Sigue la misma línea con “Life’s Mystery”, algo más melódica y tranquila, bastante agradable a la escucha e igualmente barnizada de sonidos modernos de guitarra, rompiendo a más alegre y optimista a continuación con “There’s This Girl” tan sencilla como resultona. Algo más extraña y curiosa me resulta “Could Have Been You” cuyo sonido definiría como un cruce entre The Police y Rubber, con buena y original percusión a cargo de Matt Brown, relajándose algo más en el medio tiempo electro-acústico “Surrounded”, que puede recordar a unos Nickelback algo sedados, como sucede en la más sosa y poco matizada “Flying” que se salva por los arreglos acústicos y de piano de Luke Davis. A partir de aquí empezamos a encontrar un sonido más previsible, con cortes más clásicos de A.O.R. como la suave “How It Could Have Been” que va creciendo en su intensidad, mejorando más aun en la hard rockera “My Town” en la que se hace notar la guitarra de Pat Travers que se dejó caer por el estudio para redondear el tema más interesante del disco, junto a la potente y rotunda “If You Want Trouble” que atrapa con su tremendo estribillo. Los toques acústicos reaparecen en “Feels Like I’m Coming Home” llena de buenos coros, y en la agradable pero sosilla “Feelings” que aunque va tomando cuerpo no acaba de rematar por su escaso ritmo. Como curiosidad se completa el disco con dos temas rescatados de su etapa en Bad Company, “How ‘Bout That” bastante fiel a la original mínimamente actualizada, llena de intensidad y buena instrumentación, y “Holy Water” más suave y acústica, con la voz de Howe cálida y profunda rodeada de arreglos de piano y cuerda, quedando bastante agradable, pero me quedo con la primigenia del 90. Buen colofón para un disco muy bien grabado, con temas que acaban convenciendo, y que devuelven a la escena a un músico que creo, si se hubiera prodigado algo más, podría haber tenido mayor reconocimiento.
Mariano Palomo

No hay comentarios: